El cerdo fue uno de los primeros animales domésticos en establecerse en las islas y su explotación se ha mantenido productiva y activa hasta la actualidad. La carne de cerdo de nuestra carnicería, sale de pequeñas explotaciones ganaderas tanto de la península como de pequeñas granjas ibicencas. Por lo que, a diferencia de los sistemas industriales, corren libremente y viven en sus condiciones naturales sin estrés. Algo que sin duda, se nota en su sabor. Tiene un alto contenido en proteínas, es rica en vitamina B, antioxidantes y minerales.